Brockmire

Jim, que ya está retransmitiendo partidos de las ligas menores en Nueva Orleans, está preparado para las ligas mayores en Atlanta.

A pesar de las protestas de Jim, Charles necesita la noche libre por su cumpleaños. Jim intenta organizarle una fiesta, pero las cosas se descontrolan rápidamente. Cuando Jim se presenta en la cena de cumpleaños de Charles y conoce a su criticona familia, surgen las tensiones.

Jim y Uribe se van de juerga y acaban borrachos. Charles descubre una triste realidad sobre Brockmire. Mientras está trabajando de locutor con Raj, Brockmire se toma unas cuantas copas de más.

Jim se enfrenta a su disfuncional familia en el funeral de su padre y se esfuerza por arreglar la mala relación que tiene con su hermana. Además, debe hacer las paces con alguien de su pasado.

Jules visita a Jim, que le da una vuelta por Nueva Orleans. Reanudan su relación durante una noche, pero no les resulta fácil definir las nuevas condiciones de su relación.

Jim acepta un nuevo trabajo como locutor de las grandes ligas de Atlanta. Charles se centra en la nueva dirección que podría tomar su carrera. Al enfrentarse a la realidad de un locutor legendario, Jim intenta hacerlo bien, de la manera más Brockmire posible.

Después de que Jim acaba en el hospital, Charles organiza una intervención para poner fin a sus hábitos destructivos. A la reunión asiste un variopinto grupo de amigos y enemigos del pasado de Brockmire, y este conoce a un nuevo y peligroso amigo.

Jim se va de juerga con su nueva amiga nihilista, Elle, que lo arrastra hacia un nuevo nivel de destrucción. Brockmire acaba de nuevo en el hospital y por fin se toma en serio la rehabilitación. Charles le ofrece una nueva oportunidad.