La tribu Bhanta son acusados de robar en la propiedad de un hacendado local y algunos de ellos son apresados. El capitán de policía recibe la misión de apresar al sultán de los Bhanta, tras el ataque que éste ha efectuado a la prisión donde se encontraban sus familiares. Para atrapar al sultán encierran a todas las mujeres y niños de la tribu en un tren con dirección a Delhi.