Paul Barnell es el propietario de una agencia de viajes, que está pasando una situación personal complicada, ya que su mujer, Margaret, sufre una enfermedad degenerativa. Paul decide utilizar un cadáver que ha aparecido en un basurero cerca de su oficina para intentar cobrar la póliza del seguro de vida de su hermano y con el dinero mudarse con su esposa un lugar más cálido.