Leila es una asesina condenada a cadena perpetua que, tras 12 años de cárcel, recibe el indulto. Antes de dejar la prisión, Jacob, un cura rural anciano y ciego, solicita su ayuda como asistente. Dos mundos radicalmente opuestos se entrelazan en esta emotiva historia sobre el perdón, la amistad, el cuidado del día a día, las dificultades de hacerse mayor y el inmenso poder de la redención.