Sabiendo que es la única manera de conseguir un futuro mejor, Muna y su hijo adolescente, Fadi, dejan Palestina en busca de una nueva vida en una pequeña ciudad de Illinois. Allí, en Amerrika, tendrán que esforzarse por encajar en una nueva cultura sin perder la propia, enfrentándose a un entorno que, tras la invasión de Irak, mira con desconfianza a todo Oriente Medio.