El Puntero

En tiempos difíciles donde la pobreza y los marginados crecen desmedidamente, la gente no se siente escuchada ni representada por sus políticos. El Gitano es una pieza clave en este ir y venir político por su acercamiento y lucha junto al pueblo.

El Gitano sale libre y debe seguir luchando por conservar su liderazgo, pero un nuevo golpe lo tira cuando Clara decide irse de la casa junto con su hijo. Lombardo llena las calles con droga y cierra negocios a espaldas del Puntero.

El Gitano planea una nueva estrategia, incendiar varias casas del lugar, para cobrar el subsidio de la Municipalidad y con ese dinero construir mejores viviendas. El plan queda en manos de Lombardo y Levante, pero cometen un grave error.

La Municipalidad quiere hacer reformas en el barrio pero El Gitano no está dispuesto a permitirlo. Clara acepta un cargo en el Municipio sin imaginar lo que hay detrás. El Gitano está dispuesto a enfrentarse a su ex mujer y pelear por su proyecto.

Después de que el paraguayo Salazar deja malherido a El Gitano, es llevado al hospital. Clara se entera sobre el atentado que sufrió su ex esposo y acude de inmediato. El Puntero descubre que Lombardo dejó escapar al paraguayo Salazar.

Lombardo deja la casa del Gitano y está dispuesto a todo. Lemme, el oponente de Perotti, a quien le ofrece su ayuda buscando protección política. La constructora llega al barrio, y todos los vecinos celebran el nuevo logro del Puntero.

El Gitano cambia el nombre de una de las calles del barrio por “Don Calda”, en homenaje al vecino muerto en el incendio. A la municipalidad llega Hernán Ponosky, un auditor del gobierno y Mónica Dorio, una ex amante del Gitano

Luego de enterarse de que fue Loiro el responsable del ataque a su hija, El Gitano comienza a distanciarse del Intendente y sus aliados. El Gitano está dispuesto a enfrentar a Iñiguez, pero todo se sale de control cuando Loiro muere inesperadamente.

Mónica queda impresionada con Facha y le entrega su tarjeta para que la busque. Libertad necesita reunirse con su madre que está internada en un hospital, pero se lleva una desagradable sorpresa. El Gitano habla con Facha y le hace una petición.

El Gitano se mete de lleno en su campaña política para ser el nuevo Intendente, pero Íñiguez no se da por vencido y junto con Leme le darán pelea buscando la reelección. Mónica decide ponerse del lado de Perotti, la guerra política está declarada.

Clara es acusada de un crimen injustamente, al no haber pruebas suficientes es puesta en libertad. El Gitano se mantiene cerca de ella pero un nuevo obstáculo se interpone entre ellos. Ella le confiesa toda la verdad de su pasado a El Gitano.

El entierro del hermano de Lombardo se lleva a cabo y el Gitano le ofrece a Leme devolverle el trabajo y la dignidad de todos los trabajadores del taller. Durante el sepelio, El Sacerdote responsabiliza a Íñiguez del crimen, por su ineptitud.

El gitano logra salir adelante con el taller clandestino junto a Levante y Lombardo y logran terminar las primeras camisetas, pero la policía les ha preparado una sorpresa. El gitano y Clara asisten al partido de fútbol de Francisco.

El Gitano junto con Levante y Lombardo inician una investigación sobre la trata de mujeres, y descubren que uno de los vecinos del barrio está coludido junto con varios políticos. Lombardo se entera que Pochi está embarazada.

Los remedios que robaron Lombardo y Levante de la farmacia están caducados, Clara inicia una investigación y descubre que Íñiguez está involucrado en el negocio de los medicamentos. La hija de el Gitano tiene una relación con el cura Miguel.

Los trabajadores de limpia se van a paro, Atilio no está dispuesto a levantar la huelga hasta que Iñiguez les dé el aumento. El puntero no confía en Iñiguez y cree que lo está usando. Libertad decide terminar su relación con el padre Miguel.

Clarita enfrenta graves consecuencias al aceptar la tesorería. El Gitano se entera que Lemme entregó un video donde lo culpan de no sumarse al movimiento para hundir a Iñiguez. El Gitano le pide a Lombardo que robe el video a Lemme.

El Puntero, Lombardo y Levante movilizan las fuerzas del barrio para obligar a Leme a que renuncie pero todo se sale de control. El padre Miguel habla con Levante sobre Libertad. Después de recuperarse del infarto, Iñiguez regresa a tomar su puesto.

Iñiguez cumple su palabra y le entrega al Gitano, la logística del plan de viviendas para los habitantes del barrio. Lombardo se entera que el hijo que espera Pochi es suyo.Perotti comete un error al llevar a su maestra a vivir a casa de su madre.

Levante está desesperado porque no tiene dinero y decide hacer un negocio a espaldas del Gitano. Luis intenta suicidarse después de recibir una triste noticia. El puntero echa de su círculo de confianza a Levante después de enterarse de su traición.

Lombardo aprovecha la pelea del cementerio para llevarse unos ataúdes y robar las joyas de los difuntos. La denuncia por profanación representa un gran problema para el Gitano. Lombardo ve sin querer a Levante y Libertad, besándose.

Clarita le dice al Gitano que Leme está organizando la campaña electoral de una nueva diputada. Perotti le arrebata el negocio y la ayuda con la fiscalización en el barrio. Leme no se queda de brazos cruzados. Libertad busca desesperadamente a Levante.

El asunto de la profanación de las tumbas y el robo de las joyas de los difuntos llega a oídos de la policía y la culpa recae sobre el Gitano. Chucho se entera que Pochi está sola en casa. El puntero se entera que el abogado es en realidad su hijo.

El Dogo Caruso, un síndico, busca al Gitano para proponerle un negocio. Perotti se da cuenta de las intenciones del Dogo y moviliza a la gente del barrio. El puntero no quiere reconocer que Ignacio es su hijo, pero los hechos le demuestran lo contrario.

Iñiguez amenaza a Clara si no logra que el Gitano deje de provocarlo. El Dogo decide arrebatarle el terreno a Perotti y envía una parte de la barra brava para que corran a los manifestantes. El Gitano está preocupado por Libertad.