Will recibe la libertad condicional para cuidar de su sobrina Stacey, quien quedó huérfana tras la muerte de su madre, al no haber nadie que pueda encargarse de ella. Mientras buscan un hogar provisional en las midlands irlandesas, Will desobedece varias veces las obligaciones de la libertad condicional en sus intentos desastrosos de ser una figura paterna responsable.