La historia del ratoncito continúa con nuevas aventuras. Pérez tiene ahora un trabajo diario. De día trabaja en una fábrica de perlas y de noche retoma sus viejas costumbres; recoger el diente escondido bajo las almohadas de los niños. Nunca se toma tiempo para descansar y poco a poco va a sentir esto. La divertida aventura comienza cuando Pérez se queda dormido en la casa de Lucas.