Malicia

El asesino de Laura Parodi es liberado. Daniel Parodi, padre de Laura, renuncia a su trabajo. El Artista trabaja con esmero en la falsificación de billetes dólares en un taller clandestino. Por otra parte Ernesto y Diego revisan las huellas que dejaron en la librería.

Parodi obsesionado, busca información del grupo liderado por un psicópata. Desconfía de Malena Sanz, joven abogada ex secretaria de juzgado, ella aporta información sobre el grupo que persigue él. Parodi se disculpa con Quaranta- Fiscal- y le ofrece sus servicios como investigador.

Parodi, Malena y Ernesto investigan y recopilan pistas. Malena provoca un encuentro con un ex compañero de trabajo. Quaranta y Parodi van tras un testigo clave del caso de Funes. Paralelamente Ernesto y Malena van tras Amalia Gómez.

Marcos Setter -psicólogo de Parodi- atiende a un paciente que sufre acoso. La familia del paciente lo demanda por mala praxis. Mientras, Parodi y Quaranta pierden la única pista para llegar a la banda. Malena y Marcos se relacionan de otra forma. Quaranta y Parodi exhuman el cadáver del supuesto Funes.

Parodi, desesperado entra a la pileta y lo que ve es aterrador. Ernesto, Diego y Parodi ensayan una coartada. Parodi increpa al capataz del cementerio sobre el cadáver exhumado y dispone una encuentro con el Artista.

El grupo, en la librería, arma una estrategia para recaudar dinero. La enfermedad de Ernesto avanza. Por otra parte, hay un acercamiento entre Diego y Malena. Quaranta es nuevamente amenazada. Parodi recorre el taller clandestino en busca de respuestas con un giro inesperado.

Parodi malherido intenta irse del hospital. Quaranta perturbada hace un identikit del violador y éste vuelve a atacar. Ernesto supone los pasos de el monstruo y Parodi va en su búsqueda.

El encuentro con el monstruo lleva a Parodi a comenzar la búsqueda desde cero. Se presentan los resultados de la autopsia del cadáver encontrado en la tumba de Funes. Los problemas de Ernesto con su memoria se profundizan. Parodi conoce a Lidia en la pileta.

La justicia atrapa a un narcotraficante. Con los datos que le da su informante, Parodi visita al asesino de su hija. Lidia recluta a una modelo. El ADN del violador se vincula con el asesino de Laura; es portador de VIH.

Lidia y Parodi finalmente concretan una cita. El violador amenaza otra vez y Quaranta intensifica esfuerzos para atraparlo. Los padres de una chica desaparecida aportan datos a la investigación. Malena Sanz comienza a tenerle miedo a Diego.

Quaranta se propone como señuelo para atrapar al violador. Una nueva pista vincula al propietario de Los Tilos con el asesinato de Funes. El temor hacia Diego aumenta en Malena. La salud de Ernesto empeora y Parodi sufre una crisis emocional.

Malena tiene un visita inesperada en la habitación de la pensión, Ernesto intercede. Lidia con su ayudante tienen trabajo por delante. Parodi sufre una shock emocional. Quaranta, Parodi y Marcos investigan en el lugar de los hechos. Lidia y el violador se deshacen de las pruebas que los pueden incriminar.

Marcos y Parodi se encuentran con Elsa. Parodi cansado de perseguir a un fantasma, se rinde y se hunde en el alcohol. Marcos preocupado, lo contiene, le plantea sus sospechas e intenta hacerlo entrar en razón. En el panel queda un signo de interrogación sin respuestas. Marcos y Diego discuten fuertemente. En el cuarto de la pensión la libretita de apuntes de Ernesto.