Claire Randall se reencuentra con su marido tras regresar de los campos de batalla de la Segunda Guerra Mundial. Durante su segunda luna de miel, atraviesa uno de los antiguos círculos de piedra que decoran las Islas Británicas y, de repente, se ve transportada a la Escocia de 1743, azotada por la guerra y los clanes rebeldes de las Highlands.