Celia

Por una imprudencia, Pedro Knight es descubierto​ por el esposo de su amante, y tiene que hacer hasta lo​ imposible por huir, con la triste fortuna de que cae por un​ techo en medio de su escape.

Pedro se sale con la suya, y se escapa del militar.​ Llega al club Antilla en el que se presentará la Sonora, con​ la mala noticia de que no puede tocar esa noche, pues tiene​ una mano lastimada.

Pedro tiene al militar justo al frente de él y​ muerto de miedo se las ingenia para salirse con la suya. Esta vez utiliza a Celia. Por otro lado, Lola se ve completamente afectada por​ el abuso.

Gamita y Alberto encuentran por fin a Celia en el​ Club. Le dan la noticia de su padre y Celia destruida tiene​ que dejar a Pedro. Alberto queda destrozado.

Por primera vez parece que Pedro está arrepentido​ de sus actos y entiende que la vida que está llevando es​ todo un infierno. Simón aparentemente se alegra por la partida​ de Celia.

Celia está frente a su ídolo, el maestro Rogelio​ Martínez, quien parece que va a desenmascarar a Pedro. Sin​ embargo, no lo delata, pero​ le deja claro a Pedro que con Celia no puede jugar.

Pedro nunca se hubiera esperado que Celia lograra moverle​ todas las fibras de su cuerpo. Myrta Silva,​ será quien dará la última opinión sobre la​ posibilidad de que Celia pueda reemplazarla.

Después del momento vivido junto a Myrta Silva, Celia​ está más decidida que nunca a continuar con el concurso, y Anita se lo hace saber a Ollita, quien no tendrá de otra que ayudar a su hija.

Pedro termina confesándole a Mario que la feíta le robó el corazón, y está completamente enamorado de ella. Aunque todo parecía indicar que Pedro iba a cambiar, prefiere evitar pensar en Celia.

Simón, sin importar la humillación de la que es víctima​ con su esposa, le rinde pleitesía a Eliécer y lo deja entrar a su casa, para comprobarle que su hija Lola no se esconde allí.

Celia desilusionada decide no concursar y esconder que siempre estuvo enamorada de Martín, para no herir a su hermana Noris. Lola por fin le cuenta la verdad de su​ situación a Celia.

Pedro ya no puede ocultar más lo que siente por​ Celia, y con la ayuda de Mario se mete a su casa para​ declararle su amor, Celia no puede evitar sentirse conmovida.​

Una gran sorpresa invade el Radio Teatro en medio​ de la presentación de Celia, cuando Simón se lleva todo por delante para interrumpirla, pero aún así, ella con su ímpetu interior canta.

La familia de Celia se viene abajo, Simón está​ decidido en irse de la casa por la desobediencia de su hija, para Ollita está primero la felicidad de Celia que la de un​ esposo terco y machista.

A Pedro se le complican más las cosas, ahora nada​ más y nada menos Noris se ha enterado sobre su mentira, y lo​ amenaza con contarle toda la verdad a Celia.

Alberto cree que ha tomado una decisión correcta​ al enlistarse con los Barbudos. Está convencido de que es la​ única forma de conseguir el amor de Celia.

Celia discute con Pedro y le dice que no lo perdonará. René y Rogelio le hacen una audición a Celia, y anuncian que será la nueva cantante de la orquesta Sonora. Pedro sufre de desamor por Celia.

Celia más decidida que nunca enfrentará a Pedro​ por su renuncia a la Sonora Matancera, y con unas palabras​ rotundas y fuertes lo pondrá contra la espada y la pared.

Gamita ha dejado a un lado su orgullo en contra de​ Pedro y en vista del gran amor que Celia siente por él, logra​ convencerlo para que no se vaya de La Habana.

A pesar de la advertencia de Rogelio prohibiéndoles​ tener una relación dentro y fuera de la Sonora Matancera,​ Celia y Pedro se encuentran por casualidad en El Tropicana.

Lo que comienza como una simple celebración en​ Tropicana, termina siendo para Celia una catarata de​ sentimiento, y comienza a vivir una nueva vida llena​ de fama y reconocimiento.

La era de Celia con la Sonora Matancera ha empezado​ con su primera gira internacional. Luego de pasar los nervios​ por el que fue su primer viaje en avión, Celia ha cautivado a todos.

La revolución a cargo de Fidel Castro​ sienta un precedente en Cuba. Alberto, con una apariencia​ distinta y un semblante lleno de odio, hace parte del ataque​ al Cuartel Moncada.

Después de una aparente derrota de los Barbudos,​ Celia parece ver todo con tranquilidad por la buena racha​ que está pasando, aunque un leve dolor de cabeza de Ollita​ sea el aviso de una desgracia.

Influenciada por los consejos de Ollita y por las​ demostraciones de amor de Pedro, Celia está dispuesta a hacer​ pública sus intenciones de establecer el comienzo de una relación consentida.